Reducir el consumo energético en la cocina es una manera eficaz de ahorrar dinero y contribuir al cuidado del medio ambiente. En Hélice Cocinas sabemos que la cocina es uno de los espacios del hogar donde más energía se consume diariamente. Por eso, queremos compartir contigo siete consejos prácticos para que puedas minimizar el gasto energético en tu cocina sin renunciar a la comodidad ni a la eficiencia.
Una de las decisiones más importantes para reducir el consumo energético en la cocina es optar por electrodomésticos eficientes. Los modelos con etiqueta energética A++ o superior garantizan un menor consumo eléctrico sin comprometer el rendimiento. Refrigeradores, lavavajillas, hornos y placas de cocina modernas cuentan con tecnologías que optimizan el uso de energía, como el modo eco o sensores inteligentes que ajustan su funcionamiento. Además, mantener los electrodomésticos limpios y en buen estado, como limpiar filtros o rejillas, favorece su eficiencia y prolonga su vida útil.
Aunque puede parecer un detalle menor, cocinar con tapa reduce significativamente el tiempo de cocción y evita la pérdida de calor. Esto se traduce en un menor uso de energía en placas vitrocerámicas o cocinas de gas, ya que se mantiene el calor dentro del recipiente y se acelera el proceso de cocinado. Además, cocinar con tapa conserva mejor los nutrientes y sabores de los alimentos.
Una estrategia sencilla para ahorrar energía es apagar el horno o la placa unos minutos antes de que termine la cocción y aprovechar el calor residual que permanece en los utensilios y el horno. Este calor continúa cocinando los alimentos sin necesidad de seguir consumiendo energía eléctrica o gas, ayudándote a bajar tu consumo energético sin afectar la calidad de tus platos.
El frigorífico es uno de los electrodomésticos que más energía consume en la cocina. Para reducir su impacto energético, evita abrirlo innecesariamente y asegúrate de que la puerta cierre correctamente. No sobrecargues el interior, pues una buena circulación del aire frío es esencial para su eficiencia. Ajusta la temperatura a entre 3 y 5 grados centígrados para mantener los alimentos en óptimas condiciones sin un gasto excesivo. Además, descongela el congelador de forma regular para evitar que la formación de hielo incremente el consumo.
La iluminación en la cocina es esencial para trabajar cómodamente, pero puede suponer un gasto energético elevado si no se elige adecuadamente. Las bombillas LED consumen hasta un 80 % menos energía que las bombillas incandescentes o fluorescentes y tienen una vida útil mucho mayor. Además, la luz LED es más agradable y puede ajustarse en intensidad y temperatura de color, mejorando la experiencia visual en la cocina.

Para saber más sobre las ventajas y el impacto energético de la iluminación LED, visita esta guía practica de Energy Star.
Usar ollas y sartenes que no se ajustan al tamaño de la placa de cocina puede desperdiciar energía, ya que parte del calor se pierde alrededor del recipiente. Siempre es mejor usar utensilios que correspondan al tamaño del quemador o zona de cocción para que el calor se distribuya eficientemente y no haya pérdidas innecesarias. Lo mismo ocurre con pequeños electrodomésticos: optar por modelos proporcionados a tus necesidades ayuda a ahorrar energía.
Una cocina bien ventilada evita que la humedad y el calor se acumulen, lo que podría hacer que los electrodomésticos trabajen más para mantener la temperatura adecuada. Además, una buena ventilación previene la formación de moho y protege tanto los muebles como los electrodomésticos, prolongando su vida útil. Siempre que sea posible, abre ventanas durante la cocción y utiliza campanas extractoras eficientes para mejorar la circulación del aire.
Reducir el consumo energético en la cocina día a día es posible con pequeños hábitos y decisiones inteligentes. Desde elegir electrodomésticos eficientes hasta cocinar con tapa o aprovechar el calor residual, cada gesto cuenta para lograr una cocina más sostenible y económica. En Hélice Cocinas apostamos por soluciones que combinan diseño, funcionalidad y eficiencia energética para que disfrutes de un espacio bello y responsable con el medio ambiente. Aplicar estos consejos te permitirá no solo reducir tu factura eléctrica, sino también cuidar el planeta sin renunciar a la comodidad y calidad en tu hogar.